23 mayo 2010

...cosas imposibles

Es curioso el modo en que suceden ciertas cosas.

El finde pasado, mi cantante favorito se presentaba en Caracas, mientras yo en Madrid me lamentaba por no poder estar allí.

A Cerati lo vi por última vez en la gira de reencuentro de Soda Stereo. Un día que esperé y preparé por algo más de un año. Porque Soda Stereo no era un grupo de mi época. Las canciones no me las sabia. Y muchísimas de ellas jamás las había escuchado. Sin embargo, aprobé con un sobresaliente. Porque llegado el día, me dejé la garganta y la memoria. Hoy hago recuento del concierto y lo único que logro recordar con claridad es el mal rato que pasé al final. Cuando nos atracaron a Gaby, a Migue y a mi. No obstante, a Cerati no he dejado de escucharlo desde que lo oí por vez primera. Me perdí en sus rulos y en su acento argentino. En su manera de bailar. En sus letras. Y, también, en su maestría con los acordes.

El sábado, al salir del holandés, vi la luz. Un poster anunciando su concierto en Madrid. 22 de octubre. El día. Lo vería de nuevo. Una sonrisa. Caminé de prisa hacia El Corte Inglés. Y compré mi entrada. La ilusión no me la quitaba nadie. O, al menos, eso creía.

El domingo pasado, luego del concierto, le dio un ACV. Ha estado internado en una clínica de Caracas. Miles de rumores pululando alrededor de todo el asunto. Que si estrés. Que si drogas. Que si alcohol. Incluso la viagra se ha mencionado. Sinceramente, a mí nada de eso me importa. Porque, al igual que muchos de los que me han escrito comentándome el asunto, sólo quiero que mejore y que vuelva a estar bien. Me da miedo pensar que no pueda tocar más nunca como lo hacía. Me aterra que pueda quedar dañado después de todo lo que han tenido que hacer para mantenerlo con vida y estable. No quiero creer que luego de tanta emoción y de tener mi entrada en la mano, la historia me vaya a jugar esa mala pasada.

Ayer, escuchando sus canciones, no pude evitar trasladar sus propias letras a este caso. Nadie podía haber previsto que algo así sucedería. Pero ese "...sé que me esperas/será la cura para todo/la cura para todo mal/que no merezcas...", se me hace fatídico. Y espero que otras letras sean su respuesta a todo esto: "...terco como soy/no me voy/me quedo aquí..."

Yo quiero aferrarme a esa idea.
Porque, después de todo, sólo él puede hacer "Cosas imposibles".

2 comentarios:

Jota Palacios dijo...

Compartimos el disfrute de la música de Cerati.

Canciones convertidas en himnos de guerra personales para enfrentar la dureza del día a día. Melodías que cruzan nuestros oídos y provocan reacciones neuronales reflejadas finalmente en forma de 'piel de gallina'.

La inmortalidad de Cerati ya se instaló en su música.

Aquí una canción compartida con mi compatriota Andrea Echeverri.

Paperback Writer dijo...

Cerati no se va. Se queda, y va a cantar. Lo verás volver.